En primer lugar quiero presentarme, soy Sara Jiménez, una de las integrantes del equipo comercial y administración de Premium Servicios. Desde que comencé mi camino en esta empresa, una de mis principales tareas aquí, junto a mis labores de Administración, es el Outsourcing. ¿A qué nos referimos exactamente con este término?
La palabra “Outsourcing” viene del inglés y es un término muy utilizado en nuestro idioma que significa Subcontratación, también existen equivalentes como pueden ser externalización y tercerización. Deriva de “out” que significa fuera y “source” que se traduce a fuente u origen, es decir, que hablamos de una fuente externa. Hay muchos conceptos para definir el Outsourcing pero bajo mi punto de vista el más completo es el siguiente:“El Outsourcing es el contrato que una empresa realiza con otra empresa, para que esta desarrolle una o varias actividades complementarias a la actividad principal en su nombre».
Con este método, la empresa principal contrata a una empresa externa especializada para gestionar una parte de la compañía en nombre de ésta, y así centrarse en su actividad principal para mejorar en ciertas funciones y sacar el máximo provecho en sus labores diarias para aumentar su eficiencia y alcanzar una mayor productividad ahorrando costes y tiempo. Para que la empresa externa pueda realizar las actividades que se pactan, ésta debe contar con los medios necesarios para llevarlas a cabo, sin que todo esto influya en ningún momento en el cliente final, ya que para él no debe existir ninguna diferencia entre la empresa contratante y la subcontratada. Si nos referimos a nuevas tecnologías, externalizar servicios puede referirse a una tarea muy concreta como la introducción de datos o el mantenimiento de servidores o a la delegación directa de toda la estrategia y operativa tecnológica a la empresa subcontratada. A parte de otros sectores, el outsourcing está ampliamente aceptado y extendido en el ámbito de las tecnologías de la información y comunicación (TIC).
Después de esta descripción, me gustaría explicaros mi experiencia personal diaria con lo que es el Outsourcing Comercial. Trabajamos conjuntamente con un cliente que distribuye e importa multitud de marcas de calidad, cuyo ámbito comercial se extiende por toda España. Se detectó hace un tiempo que contaban con una base de datos de clientes potenciales que quedaban registrados al realizar una compra en su página web pero no se realizaba ningún tipo de seguimiento posterior. Hoy en día, debido a la situación de mercado que nos encontramos y todos los cambios que se producen, no se pueden dejar escapar estas oportunidades, por lo que acordamos externalizar este servicio. Mi labor consiste en captar esos clientes potenciales, y que se conviertan en clientes activos de esa empresa, realizando un seguimiento comercial personalizado, con ello conseguimos un aumento de productividad y una fidelización hacia ese cliente.
Por supuesto, desde algunos sectores no se comparte la idea de la externalización de servicios, en muchas fuentes podemos recolectar diferentes opiniones, pero subjetivamente y según mi trabajo diario os voy a rebatir 3 de las más comunes para que puedan entender mejor el proceso que hacemos:
1. “Dicen que la empresa contratada no comparte la cultura de la empresa” Desde que empecé con esta tarea, conocí las instalaciones de la empresa, a sus trabajadores y responsables, toda la metodología y el funcionamiento del que disponen y perfectamente me integro en “su cultura” y trabajo día a día con ellos, ya sé cómo actúan y las pautas y jerarquías que utilizan.
2. “Metodologías de trabajo que influyen en los resultados y generan retrasos y pueden provocar otro tipo de fallos” Pues tampoco lo comparto para nada, recibí la formación necesaria para realizar estas tareas y tengo el apoyo necesario todos los días de estos “otros compañeros” que sin lugar a dudas, me hacen sentir como una más y me apoyan en lo necesario para que todo el trabajo se realice con profesionalidad y absoluta normalidad.
3. “No hay compromiso moral de un trabajo bien hecho en la subcontratación al no formar parte de la empresa y hay riesgo de no haber motivación ni lealtad” Mi punto de vista es totalmente contrario, desde Premium contamos con un equipo humano especializado y fiel, que como en mi caso, se compromete en hacer lo que sabe hacer y en dar lo mejor de sí por y para el cliente, y consecuentemente reporta beneficios para ambos y más experiencia y seguridad.